De enero a la fecha se ha registrado un total de 59 intoxicaciones por picadura de alacrán, la mayoría de estos en la Huasteca Potosina, y en menor porcentaje se han presentado casos en las zonas Media, Altiplano y Centro.
Lo anterior según información epidemiológica del Sector Salud, ya que ante el incremento de las temperaturas en esta época, advierten sobre el aumento de la presencia de animales ponzoñosos como arañas, avispas y, sobre todo, alacranes, que se pueden hacer visibles, de manera particular, en áreas donde las altas temperaturas podrían rebasar los 40°C.
Advierten sobre el riesgo de que la población sufra picaduras de alacranes venenosos, pues, si bien, la presencia de estos invertebrados es durante todo el año, es a causa del calor cuando deciden salir de sus escondites en busca de lugares más frescos.
Cabe destacar que estos se refugian en grietas de la pared y el piso, en rejillas, bajo baldosa, ladrillos, piedras, maderas y tuberías, por lo cual se insta a tener especial cuidado cuando se examinan lugares oscuros y húmedos, pues se logran adaptar en áreas urbanizadas.
Señalaron que la picadura de alacrán puede causar dolor inmediato de intensidad variable, sin síntomas sistémicos asociados, hasta la presentación de síntomas neurológicos y cardiovasculares severos, que pueden comprometer seriamente la vida del paciente.