La explotación del agua se está realizando sin ninguna responsabilidad, iniciando la pugna entre el acceso al vital líquido por parte de las poblaciones y también con fines económicos, inclusive las aguas superficiales están por desaparecer, reveló la investigadora Violeta Méndezcarlo Silva.
Señaló que mientras no se llegue a un equilibrio en esta demanda, la oferta seguirá disminuyendo y generará conflictos no sólo entre países, sino en la misma sociedad, considerando que el agua tiene muchos usos, además de ser vital para el desarrollo y existencia como seres humanos.
Sostuvo que la postura de los integrantes del Grupo Universitario del Agua (GUA) está basada en un esquema de corresponsabilidad, donde se tiene conocimiento que los ayuntamientos son los principales responsables del abastecimiento del agua y se enfrentan a problemáticas complejas en términos de salud, desde el punto de vista financiero y hasta de las capacidades geográficas que condicionan la disponibilidad del agua y su calidad.
"Reconocemos esa multifactorialidad que tiene el problema del agua y buscamos trabajarlo desde el punto de vista de soluciones multidisciplinarias integradas, pero, sobre todo, incidir sobre la cultura de la sociedad respecto al consumo de este recurso", dijo.
Insistió en que debemos conservar los ecosistemas para las siguientes generaciones, y puso como ejemplo, el caso de la Huasteca Potosina que está ante una situación donde próximamente las aguas superficiales tenderán a desaparecer o escasear, ese ecosistema representativo se encuentra en peligro por una falta de visión de largo plazo de conservación.