Yesenia Castillo Orta, vecina del fraccionamiento El Carmen 1, sufrió un ataque de un perro mientras se dirigía a su hogar, en la intersección de las calles Bertha y Plaza Reina Elena.
El incidente dejó como saldo una grave herida en el pie que requirió la intervención médica; los hechos sucedieron el pasado sábado, y aun cuando los propietarios del animal estaban presentes durante la agresión, se negaron a asumir su responsabilidad, argumentando que sólo lo tienen bajo resguardo y desconocían si está vacunado.
Yesenia, quien es madre soltera y trabaja como vendedora de cambaceo e instructora de spinning, se ha visto obligada a suspender sus actividades laborales debido a su lesión, lo que ha agravado su situación económica, pues hasta el momento ha gastado 2,400 pesos en atención médica particular.
La afectada compartió su caso en redes sociales; sin embargo, los propietarios del perro la contactaron para exigirle que eliminara la publicación a cambio de cubrir la mitad de sus gastos médicos.
Al considerar esta propuesta injusta, decidió no borrar el mensaje y continuar denunciando el caso, y también acudió a la Dirección de Ecología para reportar el ataque, pero no ha recibido respuesta.
Ahora enfrenta las secuelas físicas y emocionales del ataque, además de la carga económica que esta situación le ha generado.