Para agrupaciones ambientalistas de la región, la vegetación que se desarrolla en las laderas contribuye directamente en la conservación del suelo y a la retención de su humedad.
Ante esta importancia en el medio ambiente, consideran necesario que las autoridades correspondientes implementen programas para que ésta sea preservada.
Y es que, además, destacan es el refugio de especies únicas, como las plantas epífitas, entre las cuales se encuentran las bromelias y orquídeas, que destacan por su belleza.
Incluso refieren que es fundamental porque también en estas áreas anidan aves en riesgo como los loros y pericos, que comúnmente son sustraídos de su hábitat para comercializarlos.