Uno de los casos que se dieron a conocer entre los asistentes a la conmemoración del Día Internacional de Víctimas de Desaparición Forzada, fue el de Wendy Rodríguez, quien por más de una década ha buscado, cansada y angustiada, a su hijo Gerardo Uribe Rodríguez, quien desapareció el 7 de noviembre de 2012, con la esperanza de que esté con vida.
Ayer, en la Plaza Principal de Ciudad Valles se concentraron familiares y autoridades para rendir homenaje a las personas desaparecidas y pedir que las sigan buscando, que no se olviden de ellas y que no den carpetazo a los casos.
La afligida madre dijo que Gerardo, a sus 30 años de edad, fue visto por última vez mientras se dirigía a Ciudad Mante, Tamaulipas, donde trabajaba para otra persona, que también desapareció con él.
Dijo que se han se han adentrado en la cordillera de Tamaulipas y buscado hasta debajo de las piedras, sin dar con su paradero, pero reiteró que a pesar de que ya son varios años de búsqueda, aún mantiene la esperanza de encontrarlo con vida.
"Espero encontrar algo de él, que nos den la noticia de que hallaron un huesito, cualquier cosa que nos ayude a traerlo de vuelta", expresó.
Durante la inauguración de este evento que se realizó a nivel nacional, un hombre, familiar de otro desaparecido, se quitó la camisa para exponer las letras pintadas en su pecho que decían: "dónde están".