Derivado de las recientes lluvias, algunos árboles sufrieron daños y podrían representar un riesgo a la población, por lo que se pide tomar evidencia gráfica y solicitar el permiso de derribo ante la Dirección de Ecología, que tiene un costo de una UMA, y así se evita sanción por la tala.
El titular de la dependencia, Luis Ángel Galván Morales, informó que revisaron varios casos recientemente, de algunos ciudadanos no tenían permiso y que argumentaban que ya estaban por caerse.
“Es entendible que la población utilice estos árboles para leña u otro uso, pero lo recomendable es que se pida permiso”, expresó.
Dijo que los árboles que se cayeron se tienen que evidenciar con gráficas, antes de que sean talados para justificar que estaban derribados, pues de lo contrario podría suponerse que no fue así.
“Existe una situación real de que algunos árboles cayeron con la tromba reciente, por eso mismo se deben hacer las podas correctas y aquí en Ecología se les in forma cómo hacerlo y se les otorga el permiso”, comentó.
Finalmente dijo que la valoración del riesgo la determina Protección Civil, que en caso de existir un riesgo, acude a derribarlo con el debido proceso.