Una empresa dedicada a la venta de libros católicos se instaló en la Plaza Principal para reclutar a personas interesadas en su oferta de trabajo; al respecto las autoridades del Municipio se dieron a la tarea de investigar, ya que afirmaba que tenía los permisos, sin embargo en tres horas generó aglomeración y violó las disposiciones emitidas por la Coepris.
Después de unas horas, el titular de Desarrollo Económico, Raúl Hernández Camacho, salió a comentar ante los medios de comunicación que se trataba de una empresa formal, que habría solicitado el permiso.
Pero este nunca se le otorgó, incluso una de sus auxiliares se encontraba con ellos asesorando a los asistentes, indicándoles que esa empresa tenía antecedentes negativos.
Trascendió que fue el propio directivo de Desarrollo Económico quien le habría dado la oportunidad de instalarse, ya que en anterior fecha se había colocado sin ningún problema.
Al lugar nunca acudió personal del Sector Salud y los asistentes estuvieron en contacto con esta persona que no cumplía los protocolos sanitarios necesarios para la atención en un sitio público, en pleno semáforo epidemiológico naranja.