El acueducto Monterrey VI, que significa el trasvase de agua del río Pánuco a los estados de Nuevo León, Tamaulipas y Texas, debe detenerse, pues eso forma parte de las causas de la crisis hídrica en México, que trasgrede los derechos humanos y colectivos, así como a los ecosistemas.
Esta fue una de las resoluciones del VI Encuentro Nacional de Incubadoras de Contralorías Ciudadanas Autónoma del Agua, desarrollado en el municipio de Xilitla y en el que participaron grupos promotores de la defensa del líquido en el territorio nacional.
Ahí, ratificaron que este cambio radical de paradigma en la gestión de las aguas debe detener la privatización, el acaparamiento y la contaminación, con medidas muy precisas.
"Asimismo, por el enorme daño causado a este bien común y al entorno natural que lo hace posible, es fundamental elevar la participación social a la categoría de guardián natural de las aguas en México", puntualizaron.