Los grandes terratenientes que aún existen en la zona Huasteca, acaparan el agua causando que los campesinos dedicados a la siembra de granos básicos en pequeñas escalas, padezcan los efectos de la falta del recurso.
Gustavo Salvador Ildefonso, líder social de la región, señaló que los propietarios de empresas como Praderas Huastecas y Gusi son quienes acaparan el agua del río Tampaón, mientras que los productores están sin apoyo para enfrentar la sequía.
“Los campesinos tienen que esperar que llegue la lluvia para poder sembrar maíz o frijol, de otra manera no lo pueden hacer, ahora cada vez es más complicado retener el agua, puesto que los ciclos de lluvia cada vez son más lejanos”, aseveró.
Hace apenas unos días la Comisión Nacional del Agua, a través del Monitor de Sequía, reveló que todos los municipios de la Huasteca están dentro de la categoría de “anormalmente seco”.