La cuenca del río Valles ha sido testigo de una historia marcada por la lucha por el recurso más vital: el agua. Los registros pluviométricos e hidrométricos del siglo XX revelan una realidad ineludible: la recurrencia de procesos de estiaje que desembocan en sequías devastadoras, lo anterior de acuerdo a la investigación "Conflictos sociales por el uso del agua en la cuenca del río Valles, Huasteca, México".
Este señala que, a pesar de estas condiciones adversas, la cuenca ha sido objeto de diversos usos a lo largo del tiempo.
Revela que en antaño el afluente sirvió como fuente primordial para actividades agrícolas, abasteciendo de vida y sustento a comunidades enteras.
Con el avance de la tecnología, emergió una nueva era, caracterizada por la generación de energía eléctrica mediante turbinas. Además, no se puede pasar por alto el suministro de agua entubada a la población, facilitado por equipos de bombeo de vanguardia.
Sin embargo, estos usos han desatado una serie de conflictos, exacerbados por la escasez de agua durante los períodos de estiaje y sequía. Desde disputas entre usuarios agrícolas hasta enfrentamientos entre estos y los concesionarios de la energía eléctrica, la cuenca del río Valles ha sido escenario de tensiones constantes.
Un análisis detenido de estos conflictos revela una desconcertante realidad: la lejanía del Gobierno Federal para encontrar soluciones viables. Aunque estos desacuerdos no siempre desembocaron en violencia física, reflejan una profunda incapacidad para abordar los problemas subyacentes.
Una de las causas fundamentales de estos conflictos radica en la falta de un conocimiento adecuado sobre la disponibilidad del agua. Las concesiones se otorgaban sin una evaluación exhaustiva de los recursos hídricos, lo que resultaba en solicitudes de volúmenes estratosféricos de agua, desde 8 hasta 20 metros cúbicos por segundo.
En un país donde el agua es un recurso invaluable, la gestión responsable de la cuenca del río Valles se convierte en una tarea ineludible para garantizar un futuro próspero y equitativo para todos.