En un emotivo cierre del Congreso Eucarístico, el Nuncio Apostólico Joseph Spiteri destacó la importancia de la unidad, la fe y el amor al prójimo en la misa de clausura celebrada en los terrenos de la Feria, la tarde del sábado.
Con la participación de más de cinco mil personas de toda la región, el evento comenzó con una solemne procesión desde la Catedral de Ciudad Valles hasta el recinto ferial, donde feligreses de diversas comunidades se congregaron para vivir el fervor de la celebración.
Durante su homilía, Spiteri subrayó el valor de vivir como "una sola familia, la familia del pueblo de Dios", instando a los presentes a agradecer los dones recibidos, orar por sus familias, su comunidad y el país. Inspirado en el Evangelio, el Nuncio habló del pan eucarístico como símbolo de vida eterna y verdadero sentido de la vida humana, y exhortó a los fieles a vivir con generosidad y amor verdadero.
El representante papal remarcó la enseñanza de Jesús en el acto de compartir y el llamado a ser "misioneros de la misericordia de Dios". Alentó a los presentes a combatir el mal a través del bien, evitando la venganza o la violencia. Asimismo, mencionó la reciente Encíclica Dilexit Nos (Nos ha amado) del Papa Francisco, que profundiza en el Corazón de Jesús, invitando a los fieles a profundizar en el amor de Dios como garantía de un amor eterno y a construir una sociedad más justa y fraterna.
Spiteri finalizó su discurso pidiendo a la comunidad ser solidarios con los migrantes, enfermos y personas en soledad, y ser ejemplo del Buen Samaritano al actuar con compasión ante quienes sufren. La celebración concluyó con una eucaristía en la que el pan consagrado fue compartido como símbolo de la unidad de los fieles y del amor de Dios.