Colectivos de búsqueda de personas desaparecidas, en coordinación con autoridades locales, localizaron al norte del municipio de Valles, un rancho que al parecer operaba como campo de exterminio de un grupo de la delincuencia organizada.
En el lugar, los grupos de apoyo y corporaciones policiacas encontraron un tambo con restos óseos, al parecer humanos, totalmente calcinados, además de ropas y otras pertenencias de personas extraviadas, al parecer originarias tanto de Ciudad Valles, como de Tamuín.
El predio, que presuntamente era usado por los delincuentes para desaparecer a sus víctimas, se ubica en los límites de San Luis Potosí con el estado de Tamaulipas, en el rancho denominado San Antonio, perteneciente al Ejido Laguna del Mante de esta localidad.
Según trascendió, integrantes de los grupos de búsqueda tenían días laborando por ese rumbo, apoyados por personal de la Policía de Métodos de Investigación, Guardia Civil Estatal, Policía Municipal y de la Secretaría de la Defensa Nacional, pero fue hasta la tarde del jueves cuando sus esfuerzos tuvieron frutos al encontrar restos óseos y otros indicios más.
Entre los objetos hallados en el lugar, se encuentran prendas de vestir tanto de mujeres como de hombres, además de credenciales de identificación de personas presuntamente desaparecidas.
La Fiscalía General del Estado se encarga de analizar los restos encontrados, a fin de determinar si como se presume, son humanos, para profundizar las indagaciones y tratar de averiguar a quiénes pertenecieron.