Dos mujeres de la tercera edad, fueron encontradas muertas en avanzado estado de descomposición, una en el exterior de su domicilio y la otra en el interior, hecho que generó la intervención de las corporaciones policiacas, la noche del viernes en la colonia Obrera de esta ciudad.
El macabro hallazgo fue realizado cerca de las 20:00 horas, en la calle Manuel José Othón, entre Escontría y Benito Juárez, luego de un llamado emitido al sistema de emergencias 911, por vecinos del sector.
Olores nauseabundos que emanaban de ese lugar, pusieron en alerta a los residentes cercanos, quienes solicitaron la intervención de los cuerpos de seguridad y auxilio.
Al arribar al sitio, elementos de la Policía Municipal, así como de la Cruz Roja, encontraron frente a la entrada de la puerta de la casa el cuerpo sin vida de una adulta mayor, en avanzado estado de putrefacción, lo que generaba el hedor insoportable.
Luego de iniciar las indagaciones correspondientes, personal de la Fiscalía General del Estado y de Servicios Periciales, determinaron que el cuerpo no presentaba ninguna huella de violencia, pero además al ingresar al inmueble, descubrieron el cuerpo de otra persona muerta, igualmente en estado de descomposición.
Las occisas, según se supo extraoficialmente, fueron identificadas como Vilma Ruiz y Catalina Martínez, de entre 70 y 75 años de edad, quienes vivían solas en ese domicilio, una de ellas, la que estaba en el exterior al parecer se encargaba de cuidar a la otra, porque padecía de una discapacidad motriz.
La primera en perder la vida, fue la mujer que estaba en la entrada, mientras que la segunda corrió la misma suerte, al no recibir los alimentos y cuidados necesarios.
Según las diligencias realizadas por las autoridades, las dos mujeres, habrían fallecido por causas naturales, la primera de ellas debido a un infarto y la segunda, por un paro cardio respiratorio, toda vez que era diabética e hipertensa.
En base al estado en que se encontraban los cuerpos, las mujeres tenían entre dos a cuatro días de fallecidas.
Los cuerpos fueron llevados al Servicio Médico Legal, en espera de que algún familiar o familiares se presentaran a identificarlos y reclamarlos.