Por ocho votos contra tres, el Pleno de la Corte invalidó las partes centrales de la reforma de septiembre pasado a varias leyes secundarias, por la cuales se asignó a la Sedena el control operativo y administrativo de la GN, previamente en manos de la Secretaría de Seguridad Pública y Ciudadana (SSPC).
La mayoría estableció que la reforma Constitucional de 2019 para crear la GN, fue categórica en establecer que esta corporación es de carácter civil y debe estar adscrita a la SSPC, mientras que para Sedena y la Secretaría de Marina solo se previó una participación transitoria en la conformación de la nueva policía.
La reforma de 2022, en tanto, solo se hizo en leyes secundarias porque Morena y sus aliados no tenían las mayorías calificadas necesarias en el Congreso para modificar la Carta Magna, lo que la Corte rechazó ayer.
"Resulta inconstitucional el traslado administrativo, presupuestario, orgánico, funcional y de mando que el Decreto impugnado, a través de los artículos analizados en este apartado, realiza. Éste se opone al texto del artículo 21 que, como una garantía del carácter civil de la Guardia Nacional, incorpora expresamente que ésta deberá quedar incorporada a la Dependencia del ramo de la Seguridad Pública", afirma el proyecto del Ministro Juan Luis González Alcántara, que reunió los ocho votos necesarios para la invalidez.
Arturo Zaldívar, Yasmín Esquivel y Loretta Ortiz fueron los Ministros disidentes.
La transferencia del control a la Sedena nunca se ha podido concretar, al menos formalmente, porque una jueza federal de Irapuato lo suspendió desde octubre pasado, como parte del amparo de un activista.
La Corte discute ahora los cambios a la figura de la Comandancia de la GN. La reforma asignó al titular de la Sedena la facultad de proponer este nombramiento al Presidente de la República.