Con la llegada de diversas olas de calor al país, millones de familias enfrentan una amenaza creciente: las plagas de cucarachas. Y es que de las 4 mil 500 especies de cucarachas conocidas en el mundo, México alberga 15, mismas que representan un riesgo significativo para la salud pública.
Según información de la empresa American Pest Control, las altas temperaturas y la humedad típicas de esta temporada, aceleran el ciclo vital de las cucarachas, permitiendo que sus huevos eclosionen más rápidamente.
De hecho, cada hembra puede depositar entre 12 y 18 huevecillos en una cápsula protectora llamada ooteca, a lo largo de su vida.
Una de las especies más preocupantes en México es la cucaracha alemana, conocida científicamente como Blatella germanica. Emmanuel Rosales, especialista en manejo sustentable de fauna nociva, señala que esta especie ha desarrollado una notable resistencia a varios tipos de pesticidas.
"No es de extrañarse que la naturaleza ahora nos responda con un nuevo prototipo de 'supercucaracha'", comenta Rosales, destacando que estas cucarachas han sobrevivido a insecticidas ahora prohibidos por su peligrosidad para los humanos.
La cucaracha alemana es una plaga sinantrópica, es decir, vive en estrecha asociación con las actividades humanas. Este insecto es difícil de controlar y representa un peligro para la salud pública, transmitiendo microbios y virus patógenos. Además, se le vincula con el síndrome asmático en muchas personas.
Rosales aclara que el fenómeno de la resistencia a los pesticidas se ha intensificado en áreas donde los habitantes no pueden costear servicios profesionales de exterminio, recurriendo en cambio a pesticidas comunes que se venden en tiendas. Este uso indiscriminado ha contribuido a la evolución de las "supercucarachas".
La cucaracha alemana mide entre 10 y 15 mm de longitud y su cuerpo aplanado le permite refugiarse fácilmente en grietas y huecos. Aunque poseen dos pares de alas, no pueden volar. Con tres pares de patas, son extremadamente ágiles, capaces de correr y trepar superficies lisas con facilidad.
En términos de alimentación, son omnívoras gracias a microorganismos simbiontes en su sistema digestivo que les permiten descomponer la celulosa de la materia vegetal. Se alimentan de cualquier desecho orgánico, ya sea vegetal o animal, e incluso practican el canibalismo.
La capacidad reproductiva de la cucaracha alemana es impresionante. Dependiendo de la calidad de su alimentación, una hembra puede producir entre 5 y 8 ootecas durante su vida. En condiciones de laboratorio, se ha observado que pueden vivir de 3 a 6 meses a una temperatura constante de 25ºC, aunque los machos tienden a tener una vida más corta que las hembras.