El Instituto de Fiscalización Superior del Estado detectó una serie de irregularidades e inconsistencias en el manejo de recursos en el sistema educativo de Colegio de Bachilleres que, de acuerdo con la información que se ha dado a conocer, asciende a 28.8 millones de pesos que, supuestamente, se aplicaron para el pago de prerrogativas de directivos de distintos planteles de la misma institución, entre otras anomalías.
Según detallan, las irregularidades se desprenden de poco más de 16 millones 800 mil pesos que corresponden al rubro de ingresos propios y que no aclaró en su cuenta pública. Asimismo, habría destinado casi 12 millones de pesos a la cobertura de distintas prerrogativas para directivos sin que se contara con la autorización y el protocolo adecuado para realizar este tipo de movimiento dentro de la institución.
Hasta el momento, la Dirección General de Colegio de Bachilleres no ha emitido posicionamientos al respecto, sin embargo, por ley, tiene un periodo adecuado para responder a las observaciones que se han detectado a fin de que demuestre con precisión en qué se basó o cómo fue que se argumentó la distribución de esos recursos.