Un auténtico campo de espinas, así describen los ciudadanos el estado deplorable en el que se encuentra el panteón de la colonia Estación del Ferrocarril, un lugar que debería ser de descanso y respeto, pero que ahora es un escenario de abandono e indiferencia por parte de las autoridades municipales.
Los visitantes, que llegaron desde otras localidades para rendir homenaje a sus seres queridos, quedaron impactados y profundamente molestos al descubrir que los sepulcros están prácticamente perdidos entre la maleza.
"Es una falta de respeto imperdonable", declararon con enojo, al ver cómo el Ayuntamiento, encabezado por María Soledad Carreño Linares, ha dejado que el Campo Santo se convierta en un laberinto de vegetación que dificulta el paso entre las tumbas.
Los pasillos del panteón, que alguna vez fueron transitables, ahora están infestados de hierbas crecidas y descuido, lo que hizo casi imposible a los visitantes llegar hasta los sepulcros de sus familiares. Los ciudadanos no ocultaron su decepción y reprobaron la falta de acción de las autoridades locales. "No es sólo una negligencia, es una muestra de la pésima gestión de María Soledad Carreño", expresaron con indignación.
Este lamentable estado es una prueba más de la ineficiencia que ha caracterizado los últimos meses de la administración municipal, dejando en claro que la atención y el cuidado de los espacios públicos son una asignatura pendiente.