Productores cañeros advirtieron que en el ciclo de zafra pasado les golpeó mucho la sequía y eso se vio reflejado en la producción.
Destacaron que se consiguió mantener los precios de los costos bajos, en relación a los gastos prorrateables.
Señalaron están esperando un mejor rendimiento con estas lluvias, aunque el daño se vio reflejado en las primeras cosechas de diciembre y enero, fueron irreversibles, pues toda esa caña entregada en los primeros meses de zafra bajó su producción.
“Nos mantenemos entre 900 mil a un millón de toneladas para moler para el próximo ciclo de zafra”.
Destacó que están sembrando mucho para la zafra 2022-2023, que ya sería otro cantar, porque estas lluvias sí les están beneficiando mucho.
Anunciaron que se dio un informe de la zafra anterior, la 2020-2021, donde dieron a conocer los datos de todo lo que se llevó de la zafra, únicamente con los directivos porque debido a la pandemia no fue permitido hacerlo en forma abierta.
“Estamos cuidando los protocolos sanitarios, porque se vive una situación difícil”.