Los beneficiarios de los predios donados por el Ayuntamiento, pagaron la comida que ofreció el alcalde Juan Carlos Arrieta Vita, al término de su tercer y último informe de Gobierno.
Cínicamente les exigieron cooperación para pagar lo que consumieron las autoridades municipales y funcionarios, en conocido bar ubicado en el Barrio Chacaná, rumbo a la Universidad Intercultural.
A cada beneficiario se le pidieron 250 pesos para el puerco que mataron, obligándolos a contribuir de esta manera para la mega fiesta con la que cerró la administración pública.
Algunas personas que se dieron cuenta de este asunto han criticado a Arrieta Vita, ya que hasta el último día de su gobierno abusó de su poder.