Es un chiquero la calle Ciro Purata

Pasar la calle Ciro Purata, lateral a los terrenos de la feria, es toda una aventura para automovilistas y motociclistas, sobre todo en los días de vacunación contra el Covid-19.

El lodo y los inmensos hoyos hicieron difícil la circulación de las unidades, que tenían que pasar forzosamente esa vialidad.

Los más afectados fueron los jóvenes que acudieron en sus motocicletas para recibir su vacuna, pues debido a las condiciones derrapaban.

No es nuevo que la ciudad cuente con calles totalmente destrozadas, “parecemos puercos en el lodo, aunque sea que le echen grava o algo”, expresó Miguel Ángel Martínez, vecino del ejido Estación 500.