Niños con plomo

De acuerdo con un informe reciente de Pure Earth México, San Luis Potosí ocupa el segundo lugar en el ranking nacional de niños intoxicados por plomo, con una prevalencia de 37.4 por ciento.

Según este estudio, el primer lugar lo tiene Puebla, con una prevalencia de 47 por ciento de intoxicación de menores.

Pure Earth México es una organización mundial que se asocia con gobiernos, comunidades y líderes de la industria para identificar e implementar soluciones que detengan las exposiciones tóxicas, protejan la salud y restauren el medio ambiente.

Debido a que la Organización Mundial de la Salud considera al plomo como una de las sustancias químicas tóxicas más peligrosas para la salud humana y reconoce que ningún nivel de plomo en sangre es seguro, Pure Earth en México se ha dado a la tarea de identificar las zonas más contaminadas con este metal en la República Mexicana y tienen identificados dos focos de contaminación en San Luis Potosí, que son una de plomo y otra de zinc, además de la fabricación de óxido de plomo.

El estudio publicado explica que el plomo en la sangre es un componente que afecta en diversos sentidos la salud del niño, interviniendo con su desarrollo y provocando cientos de enfermedades, por lo que detalló que la norma actual establece que se debe de tener un máximo de cinco microgramos de plomo por decilitro en la sangre, aunque hay efectos en la salud desde dos microgramos, por lo que lo ideal es no tener nada de este elemento químico en el cuerpo.

Pure Earth México señaló que existen distintas vías por las que el plomo llega al cuerpo humano, y puede ser por exposición directa a la minería, vivir cerca de alguna industria que maneje este componente, aunque en el caso de San Luis Potosí y de México, la principal fuente de exposición es la alfarería vidriada.

El estudio detalla que la alfarería que se produce en el país es quemada a menos de mil 200 grados, por lo que al mezclarse con bebidas o comidas calientes o ácidas, el plomo se quita del vidriado y pasa a los alimentos.

La literatura médica reconoce que el sistema nervioso en etapa de desarrollo es especialmente vulnerable a sus efectos nocivos, por lo que los niños menores de cinco años, que además absorben de 4 a 5 veces más plomo que los adultos, corren el riesgo de sufrir alteraciones neurológicas permanentes.

De acuerdo con el estudio de esta organización, el impacto del ploma en el sistema nervioso se manifiesta como desórdenes de conducta y déficit en el coeficiente intelectual que desembocan en bajo nivel educativo, deserción escolar y tendencias delictivas que tienen consecuencias negativas en el nivel de ingresos y en la productividad de los individuos afectados.