Falleció ícono del municipio

Un verdadero personaje icónico del primer cuadro de la ciudad, don Lino Sáenz, falleció el miércoles 2 de septiembre a la edad de 82 años, después de complicaciones en su salud.

Don Lino era originario de Chapulhuacán Hidalgo, pero desde muy pequeño quedó huérfano, por lo que llegó a esta ciudad para trabajar e iniciar su propio recorrido haciendo lo que más le gustaba, las raspas y jarabes de sabores, durante su estancia conoció a Carolina Hernández Cortés, con quien procreó 11 hijos y fue su compañera de vida a lo largo de 63 años.

Decenas de generaciones lo conocieron, famoso por sus raspas y nieves que vendió por años en la Plaza Principal, en donde siempre se caracterizó por su buen humor y las vibras positivas que trasmitía, convirtiéndose en un elemento turístico y gastronómico clásico al visitar Tamazunchale.

Fue tanta su pasión al trabajo que cuando ya no vendía su producto en el jardín, sus hijos tuvieron que apoyarlo para que ocasionalmente se estableciera en su domicilio allá por el Bulevar 20 de Noviembre en el Barrio del Carmen.

Con sus inolvidables frases como “mi amor” “mi vida” y “mamacita linda”, Tamazunchale se despide del hombre que más lo amó, Don Lino fue amigo y hermano de muchas generaciones, que a la salida de la escuela esperaban verlo y deleitarse con sus productos.

“Ahora ya no está, pero su recuerdo perdurará en todos, fue un hombre grande y muy amado, nosotros sus hijos estamos felices, contentos serenos, porque vive en nuestros corazones y porque Tamazunchale lo mantendrá vivo entre sus recuerdos”, expresaron sus hijos.