Urge apoyo contra plaga de pez diablo
El río Tampaón, conocido por su rica biodiversidad acuática, enfrenta una nueva amenaza: la proliferación del pez diablo. Según pescadores del Rancho San Carlos, esta especie invasora se ha convertido en una plaga que está afectando gravemente la pesca en la región.
El pez diablo, temido por su agresividad y capacidad de adaptación, ha invadido este afluente en grandes cantidades. Los pescadores locales han reportado que, a pesar de sus esfuerzos por mantener la pesca sostenible, esta especie está desplazando a los peces nativos, alterando el equilibrio del ecosistema acuático.
Para combatir la invasión, los pescadores han decidido retirar el pez diablo de sus redes tan pronto como lo atrapan. En lugar de devolverlos al agua, los dejan fuera de ella para que las aves locales puedan encargarse de ellos. Esta medida busca reducir la población de la plaga y minimizar su impacto en los peces autóctonos.
A pesar de la gravedad de la situación, aún no se ha establecido un protocolo oficial para el manejo de la plaga.
Sin embargo, los ejidatarios de la región han comenzado a aprovechar el pez diablo en la preparación de diversos platillos, lo que les permite controlar la población de la especie invasora y, al mismo tiempo, ofrecer una opción culinaria novedosa a la comunidad.