Piden “frenar” la venta de alcohol

Autoridades ejidales y habitantes en general, señalaron que hay venta excesiva de alcohol en las zonas rurales, por lo que hace falta regulación y vigilancia y en ese sentido pidieron a las autoridades correspondientes hacer verificaciones para ir reduciendo fenómenos sociales derivados de esta situación.

De acuerdo a señalamientos de personas como Luciano Martínez Zavala en Jalpilla o de Miguel Hernández Pérez, de Picholco, el exceso de alcohol en sus comunidades está derivando problemas que tienen que ver con violencia familiar y otros.

Señalaron que en Jalpilla hay más de 12 puntos de venta de alcohol, entre cerveza y aguardiente, mientras que en Picholco el número llega casi a los 20 establecimientos, algunos –evidenciaron- clandestinos.

Dijeron que las familias de ambos lugares ya han reportado el caso a las autoridades ejidales, pero éstas poco o nada han hecho y en cambio, los problemas derivados por el exacerbado consumo de alcohol entre jóvenes y adultos, van en aumento.

“Tenemos problemas de delincuencia juvenil, como el vandalismo o pandillerismo. Lo hemos señalado muchas veces, pero nuestras voces no tienen eco y las autoridades correspondientes no hacen nada al respecto”, dijeron.

Además, puntualizaron que lo señalado es sólo en las dos comunidades mencionadas, pero están seguros que este problema ocurre en la mayor parte de las comunidades rurales del municipio.

“Se aprovechan de la poca vigilancia que hay en las zonas rurales y venden clandestinamente o bien rebasan los horarios de venta; incluyendo que venden a niños, mujeres y uniformados”, acotaron.

Hernández Pérez pidió a las autoridades correspondientes que actúen, que sancionen a quien incurra en un delito y que se cierren los establecimientos que operan clandestinamente.